Los trabajadores han recordado que se sienten rehenes del gobierno, quien intenta reducir el déficit público provocado por el rescate a la banca precarizando sus condiciones laborales y recortando sus derechos sociales. Así mismo los estudiantes han criticado el aumento de tasas, la normativa de permanencia y la reducción del número de becas.
Por todo ello ambos colectivos, pese a no estar de acuerdo con los sindicatos mayoritarios, han animado al resto de la comunidad universitaria a apoyar la convocatoria del 14N para la movilización general y huelga.
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